Hay gentes que son

Unos ojos atentos y con la paz de un templo,

la palabra que alienta y abre todas las puertas,

esa mano colmada de caricias y pausas,

un ángel de la guarda todo el tiempo a tu espalda,

la más fuerte poción contra el mal de amor,

una estrella fugaz que ha de conceder tu afán,

Una suelta de globos verles llegar tan solo,

un tañir de campanas al recreo del alma,

la más grande fortuna que haya sin duda alguna,

como duendes de un vino que libera el instinto,

la más dulce canción directo al corazón,

como un chispeante elixir siempre que les da por reír.

Hay gentes que son todo esto y más,

mucho más de lo que pueda imaginar,

como un canto a la vida,

pan de cada día,

hay gentes que son todo esto y más

de lo que pueda imaginar.

Pato Ageitos